Un ataque ransomware filtra numerosa información sobre Capcom
Las filtraciones suelen ser algo común dentro del mundo de los videojuegos. No obstante, esto es completamente distinto, y es que Capcom ha recibido un ataque ransomware. Le habrían pedido 11 millones por su silencio, algo que la compañía no habría pagado.
Debido a esto, se ha publicado información que parece ser de 2018 respecto a futuros proyectos de la compañía.
Capcom ya ha tomado medidas para evitar otro ataque ransomware
En este post de Resetera explican lo sucedido. Tras la negativa de pagar lo pedido, el grupo que ha robado los datos ha publicado información sobre el futuro de la compañía:
- Resident Evil 8 saldría en abril, aunque tendríamos una demo antes.
- Resident Evil 8 podría tener un modo battle royale (internamente se le conoce como Project Highway/Village Online).
- Nuevo proyecto para Switch, llamado «GUILLOTINE», que saldría en febrero en la híbrida de Nintendo y en mayo en el resto de plataformas.
- Proyecto «Reiwa», que saldría en mayo.
- Monster Hunter Rise saldría en PC para octubre del año que viene. Monster Hunter Stories 2 también saldría en PC.
- Resident Evil 4 llegaría a la Oculus.
- Nuevo juego multijugador (proyecto SHIELD).
- El código fuente de DMC2 y Umbrella Chronicles
- Información respecto a lo que pagaron Stadia y Sony a Capcom por juegos/exclusividades.
Estos archivos parecen ser de 2018, por lo que la información que tenéis arriba podría haber cambiado. Lo filtrado son solo 60 GB de los 1000 GB que han robado, y todavía no se sabe si el objetivo de los ladrones es presionar a la compañía.
Capcom ya ha publicado un comunicado a este respecto. El 2 de noviembre descubrieron que habían accedido a los servidores. Los culpable serían una organización que quería dinero, que ya está denunciada a la policía de Japón y Estados Unidos.
Ya se han tomado medidas para proteger mejor sus servidores, y ha aclarado que «es seguro jugar online a los títulos de la compañía y acceder a su página web». Habrá que ver cómo avanza la investigación de la policía, aunque lo más sensible es el código fuente de los títulos.
