Este análisis destripa -jaja- totalmente The Last of Us Parte II. Si no lo has jugado, tenlo en cuenta.
The Last of Us Parte II me ha parecido una joya. Como jugador, como ente individual, la he disfrutado muchísimo. Es una aventura de terror clásica, con locas idas y venidas y desafortunados eventos. Pero tiene dos problemas muy serios.
Su duración y lo mal que prepara al jugador para la segunda mitad de la obra.
The Last of Us 2: Innecesariamente largo
El juego es largo. Mientras que el orginal dura aproximadamente unas quince horas, The Last of Us parte II es casi el doble, unas veinticuatro. Y el terror y la supervivencia no es un género que se beneficie de durar mucho. ¿Por qué? Porque es un género de acción, sigilo enfocado en el terror y la supervivencia.
El terror y la supervivencia tienen la particularidad de darte un soplo cuando acabas con cierta tensión. A medida que avanzas vas sorteando enemigos, manejando tu inventario, usando los elementos de los que dispones. Luego respiras y listo.
El primer juego sabe perfectamente darte esos momentos brillantes en una historia en cuatro actos. No dura más ni dura menos. Pero aquí, sin embargo, la estructura es diferente.
Tenemos las dos historias, la de Abby y la de Ellie. Siempre lo mismo en un road trip, ir de punto A a punto B. El problema es que la estructura es algo así:
«Infectados, exploración, malos, exploración, infectados, malos, momento de historia, infectados, momento chulo de infectados, momento de historia, malos, exploración, malos, exploración, infectados, exploración, momento de malos chulo, momento de historia, momento de historia chulo que incluye exploración, infectados, y luego cierra con una escena tremenda para acabar con el acto».
El juego es así a lo largo de las 24 horas de duración. Si el juego quitara la mitad de enfrentamientos contra infectados y contra malos, el juego sería mucho más llevadero. La idea por parte de Naughty Dog entiendo que es el sufrimiento, pero es innecesario. Sobre todo cuando luego pasas a la parte de Abby.
The Last of Us Parte II: ¿Quién es Abby?
En las primeras diez horas apenas tienes problemas porque estás metida en la historia de Ellie, pero luego saltas a la de Abby.
Naughty Dog ejecuta un tropo narrativo muy interesante que es el paralelismo en espejo. A Ellie y a Abby les pasan las mismas cosas, tienen los mismos amigos con los mismos problemas, y algunos mueren igual.
El juego te cuenta la historia de Abby para que veas que es igual que Ellie, pero también para que entiendas que el odio sólo lleva a la destrucción.
El problema es que The Last of Us Parte II no prepara al jugador para disfrutar de este paralelismo narrativo, por dos motivos.
El primero, el que ya hemos comentado antes. Se alarga en exceso. El juego está obsesionado para que la narrativa sea idéntica, por lo que la duración entre una protagonista y la otra es casi la misma.
Luego, y siendo sinceros, la historia de Abby no es tan interesante. Empatizas con el momento en el que se venga porque su padre es el doctor que Joel mata. Pero la otra parte de la historia es más bien una redención de ella misma, porque se siente culpable por haber matado a Joel y quiere hacer algo bien. Esa necesidad la saca a través de los dos personajes Sefaritas, a los que intenta salvar.
Pero claro, si uno, como jugador, se encuentra la historia de Abby, y luego uno, como jugador, se encuentra que la historia de Abby consiste en ayudar a dos muchachos que te acabas de encontrar… ¿Cómo pretende el juego que me interese por ellos si entre parte y parte interesante pasan demasiadas horas?
El título sería mucho mejor si quitara tanta paja. Os pongo un ejemplo de cómo sería un capítulo 1 ideal de Abby:
Sales de la base de los lobos. Subes al coche. Te persiguen. Te estampas en la gasolinera. Tiroteo. Aparecen otros lobos para salvarte. Luego vas a ver a Isaac. De allí te vas a por Owen. Peleas contra infectados. Los Scars te cuelgan del árbol. Te vas a la parte de huir de los scars. Llegas a la caravana. Dejas a los muchachos. Vas a ver a Owen. Pasas por el barco. Llegas al acuario. Fin del capítulo.
Lo peor es que las tramas orgánicas de Abby son impresionantes. Cuando estás en el tercer capítulo y está la isla en llamas, esa imagen es muy poderosa y el mensaje es claro. Pero claro, cuando aparece Manny justo para enfrentar al francotirador porque guionista pues pierde su identidad.
Y así con todo.
Una obra casi perfecta
Mis sensaciones al acabar la obra es que ha sido un viaje que ha valido la pena. Uno de los mejores viajes que he tenido nunca a los mandos de un videojuego. No sé cómo valorar sus puntos negativos y creo que esto sería menor problema si no estuviéramos obsesionados con las notas en los videojuegos.
Mi conclusión es que se me ha pasado el fin de semana volando mientras conocía más a Ellie y me encontraba con Abby. Es una obra más arriesgada que el primero, que cuenta una mejor historia, pero su predecesor está perfectamente empaquetado.
Para mí, para mi visión como jugador, este es el camino. Esto es lo que deben hacer los videojuegos -este tipo, vaya-, y estoy seguro de que la próxima vez el equilibrio será mucho mejor.