Análisis de Final Fantasy VII Remake: Buen juego a pesar de Nomura
LAS CLAVES DE LA NOTICIA
Final Fantasy VII Remake ha salido un buen juego. A pesar de Nomura. Vamos a hablar del juego que daba terror acercarse a él tras los últimos intentos del director de dirigir un juego. Tras el horrible Kingdom Hearts III, temíamos que el resultado fuera semejante. Pero no, por suerte tenemos un título muy bueno.
¿Cómo he jugado a Final Fantasy VII Remake?
Considero que es importante a la hora de hacer un análisis comentar cómo he jugado al juego y con qué intención.
Primero, el juego me ha durado 28 horas. No he parado apenas en nada secundario aunque sí que he intentado dar todas las vueltas necesarias por las «mazmorras» para llevarme todos los tesoros y subir de nivel.
Y no, odio hacer misiones secundarios, y platinos y todo eso. Ahora vamos al análisis por partes.
La música y los gráficos de Final Fantasy VII Remake
La banda sonora original y reconvertida no ha envejecido para nada. Además, saben apelar al espíritu de la nostalgia colándote temas en algún momento sin venir y cuento. A veces esto resulta raro y el resultado podría ser mejorable, pero la música es tan buena que una mala elección de tracks en una escena u otra no entorpece mucho al global.
En cuanto a los gráficos, no deja de sorprenderme la bella recreación de Midgar y su basto universo. Cuando la cámara se pone cerca de los personajes te preguntas si este avance tecnológico se terminará algún día. El problema es que luego se encuentra con algún bajó técnico, pero por lo demás deslumbra.
El sistema de batalla de Final Fantasy VII Remake
La idea desde el principio era buena: Tus ataques básicos nunca serán tan potentes como tus habilidades o hechizos. Pero si quieres hacer lo segundo, tienes que machacar lo primero.
En realidad el sistema funciona así: Tus primeros ataques son más suaves, pero luego remata con un combo que hace más daño. Luego cada uno de los aliados tiene un comando especial con el triángulo. En el caso de Barret, un cañonazo. De Aeris, un hechizo de hielo más fuerte cuanto más pulsas. En el caso de Tifa, un golpe más fuerte que cambia para combar. En el caso de Cloud, una postura desde la que puedes hacer parrys y más daño, pero recibir más.
Cada uno de los aliados también es diferente en su forma de atacar y moverse. Puedes esquivar con el círculo, pero son mucho mejores Cloud y Tifa que Aeris y Barret. Su patrón de autoataque también es diferente.
Pero tus rivales no. Tus rivales pueden, de un golpe, quitarte un cuarto de la vida. Salvo alguna excepción como los centinelas o las toxiratas, hasta el más masilla tiene la posibilidad de lanzarse a tu cuello y hacerte daño, mucho daño. Por eso tienes que estar muy atento a tu barra de BTC para acabar con ellos lanzando habilidades que serían el equivalente a varias cadenas de autoataques o hechizos. Y a veces tienes que usar la barra de BTC para curarte. Y cuando digo a veces es muchas veces.
El problema es que la barra de BTC de los aliados se completa mucho más lentamente que la tuya. Tienes que cambiar a los demás para que su barra se rellene más rápido.
Todos estos detalles, y alguno que se me escapará, hace que sea fundamental en muchas ocasiones ir cambiando de personajes para dar un golpe más fuerte o para usar las habilidades y hechizos de los demás que necesitas para derribar al final.
Hay momentos en donde la situación se vuelve muy frenética cambiando de personaje constántemente para cargar sus barras y ayudar o atacar. Pero el resultado no sería tan satisfactorio sin el diseño de las batallas.
La estrategia en el combate es fundamental
Satoru Koyama es mi padre. Los combates de Final Fantasy VII Remake están deliciosamente diseñados para que tengas que hacer cosas diferentes. Esto no es el horripilante Kingdom Hearts III, que puedes estar brain-afk con el cuadrado y triángulo. Aquí es recomendable usar Análisis para saber qué rellena la barra de análisis del rival o qué le afecta.
Cuando rellenas la barra de vulnerabilidad, lo tumbas y le haces mucho más daño. No siempre se puede llenar, pero es recomendable.
Las triquiñuelas e inventivas que te lanza el juego a la cara son muy interesantes, y hasta el final da la sensación de que es algo diferente cada vez que avanzas a una zona. No sólo con los jefes, también con las criaturas normales.
Si no identificas los ataques del rival y todo lo que te puede hacer muy probablemente te veas en el suelo de dos golpes, atacando con otro aliado para resucitar a los demás. Es un sistema frenético y exigente.
El diseño de niveles es meh
El diseño de niveles es un intrincado túnel alargado e insípido donde prácticamente siempre tienes que hacer lo mismo. «Cargar» una batería es una tarea que se me ha hecho larga cuando es la décima batería o generador que tengo que activar.
Esta sensación se reducía cuando se sustituía la tensión del momento por conversaciones. Sí, tenías que ir de A a B, pero mientras andabas y dabas vueltas hablabas con tu compañero en lo que posiblemente es otro punto a favor del juego.
La historia de Final Fantasy VII Remake
Esta parte contiene gran cantidad de Spoilers que revelan el nuevo argumento del juego.
La historia funciona… A pesar de Nomura. En este juego se desarrollan mucho más todos los personajes, y la verdad es que es una experiencia muy gratificante. Todo el mundo está más vivo. La ciudad entera te habla constántemente. Los barrios parecen reales, Shinra es tan grande que te parece real. Puedes saber tanto de todo el mundo que los sientes mucho más cercanos.
Se agradece que una parte de alargar el título sea así, parándose a hablar los unos con los otros, conociéndose, dando más detalles. Haces que la evolución de Cloud tenga todavía más sentido y los personajes sean más reales.
El argumento parte del original y lo potencia. Pasas por todos los momentos importantes, salpicado por otros mazmorras en muchas ocasiones sosas y alargadas. Pero hay dos problemas.
Primero, hay algunos personajes «malos» que son muy malos y están muy mal escritos. Ya sé que quizás en el original son iguales, pero aquí se les dedica más tiempo y sus diálogos son del estilo de «soy malísimo, madre mía, lo importante es lo malo que soy». Lo cuál es raro porque hay otros personajes, como Reeves o los turcos, que están mucho mejor.
Y luego, la Nomurada. Me ha gustado la idea. Me ha gustado que se hayan marcado una trampa con el título.
Final Fantasy VII Remake no lleva «capítulo 1» porque el plot twist del título es que, a partir de ahora, puede pasar cualquier cosa. Y eso me gusta. Me gusta mucho pero me da miedo. Porque lo mejor del juego es la historia original con mucha diferencia.
El problema es «cómo» te lleva hasta ese «vamos a reiniciar la historia». Desde el principio te mete en un hilo en donde aparecen como unos fantasmas llamados ecos y también Sefirot.
La historia de los ecos y de Sefirot apareciendo desde el principio es enigmática pero arbitraria. Se abusa tanto de un Sefirot que se pone delante de ti o en visiones que cuando llega el momento en el que de verdad lo ves dices «ah, que ahora es el de verdad, vaaaaaaaaale…». Te dicen que los ecos son «guardianes del destino» pero al principio van apareciendo porque les apetece, porque Nomura quiere que pienses «oh, mira, esto no estaba en el original». Pero es un millón de veces más gratificante todo lo demás nuevo que esos molestos bichos.
Llegas a la conclusión de que la historia va a ser diferente a partir de ahora porque «así lo ha querido un mago», algo característico de alguien sin talento como Nomura. Toda esa parte está muy mal escrita, con el estilo onírico y las trampas de una persona que escribe como a un adolescente para contentar a un adolescente.
Nomura todavía no entiendo que lanzar preguntas absurdas para dar respuestas tontas no hace que tu historia sea buena. Algún día lo entenderá.
Conclusión
Final Fantasy VII Remake es un muy buen juego. Tendrá elementos que están al borde del delito pero por lo demás es una experiencia maravillosa y humana, muy humana. En cuanto salga en PC me lo voy a jugar otra vez, es bien sabido.
Nota:
Nomura no toques el trabajo de los demás que está muy bien/10