TFT cuenta con un amplio abanico de objetos que convierten a campeones en auténticas bestias. No obstante, hay una combinación especialmente interesante, sobre todo de cara a denegar a los carrys enemigos: Blitzcrank y el céfiro.
Blitzcrank y el Céfiro: obligando al oponente a adaptarse a nosotros
En el vídeo que tenéis arriba, tenéis varios ejemplos de esta sinergía. Cuando hablamos de carrys enemigos, no hablamos únicamente de aquellos encargados de hacer daño. Personajes como Lulu o Janna pueden ser un auténtico quebradero de cabeza si no podemos lidiar con ellos, y gracias a Blitzcrank podemos denegarlas.
Sin embargo, en etapas tardías de la partida (mid game y late game), Blitzcrank puede perder mucho fuelle. Los enemigos más avispados colocaran a fichas de poca importancia en las esquinas, haciendo que su habilidad no sea del todo interesante.
Con el Céfiro, esto cambia por completo. Al darle a uno de nuestros campeones (o al propio Blitcrank) este objeto, la situación da un giro de 180º. Al colocar el Céfiro a un personaje que esté en la esquina, hacemos que el oponente en la esquina opuesta sea levantado por los aires.
Es importante que entendáis que el Céfiro NO levanta al campeón enfrente, sino en el lado OPUESTO, es decir, en diagonal. Al levantar al campeón de marras, el carry de turno quedará al descubierto (un Jhin con los 3 objetos, por poner u ejemplo), y podremos agarrarlo a placer (rodead a Blitz de campeones con daño).
Esta técnica es especialmente importante cuando quedan pocos oponentes, pues los enemigos no tendrán más remedio que adaptarse a nosotros, perdiendo en el camino la opción más óptima.
Si en vuestra composición tenéis un Blitzcrank, barajad la posibilidad de añadir el Céfiro a vuestro equipo: conseguiréis grandes resultados con un Cinturón de Gigante y una Capa de Negatrón.