Worlds 2020: la LEC y el potencial del dúo mid-jungla
Tenemos claro que Worlds es siempre una colisión de estilos entre las diferentes regiones, en el que acaba imponiéndose uno. Tras analizar otras regiones como la LCK o la LCS, le toca a Europa. Le toca a los equipos de la LEC.
Mid y jungla como fuente de poder
Posiblemente, dos de las posiciones que más controversia dan en la región. En mid cuesta, en general, clasificar a los mid laners en un orden más o menos claro debido al gran nivel medio de la posición. En la jungla, de lo contrario, hay cierto desnivel entre los más destacados y el resto.
Y, sin embargo, parece que en ambas posiciones presentamos en estos Worlds a lo mejor que hemos visto esta temporada. En G2 Esports hemos visto a Caps dominar pletóricamente este final de split, si bien Jankos presenta dudas de su adaptación al meta de carrys en la jungla. Fnatic es la vida al revés: Selfmade ha terminado el split como uno de los junglas más dominantes favorecido por el meta, pero las dudas las presenta Nemesis.
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— LEC (@LEC) September 6, 2020
En cambio, tanto Rogue como MAD Lions presentan puntos fuertes parecidos: dos mid laners muy agresivos y en gran estado de forma, sobretodo Larssen, y dos jugadores muy favorecidos por el meta pero con diferencias: Shadow adora el snowball con Lee Sin o Hecarim, mientras que Inspired se ha mostrado letal con Evelynn o Graves.
Dudas en la bot lane
Pese al buen nivel de tiradores este año, da la sensación de que llegan en planos diferentes: Rekkles y Hans Sama parecen venir en la cresta de la ola, con un meta que les puede empujar a jugar agresivos con Caitlyn o Jhin, mientras que Carzzy y Perkz han bajado sus prestaciones respecto a pasados momentos.
— LEC (@LEC) September 6, 2020
En cuanto a supports hay una gran incógnita, posiblemente la mayor de la región: Kaiser ha hecho una gran temporada, Mikyx ha bajado ligeramente su nivel con altibajos, Vander se ha mostrado seguro, y Hylissang ha tenido más luces que sombras. Todos han demostrado tener ese punto agresivo que les puede igualar con los asiáticos, pero les ha mancado consistencia. Y ante los mejores del mundo no se puede fallar.