Elias Lipp «Upset» se ha pasado siete años entrenando en la playa, lanzando ganchos de izquierda al aire. Quizá durante las etapas iniciales, cuando afirmaba que era como Martin Larsson «Rekkles» pero siendo mejor jugador y más guapo, desprendía un aura similar al de Floyd Mayweather Jr.: o le amabas o le odiabas, sin puntos intermedios. Muchos seguidores de la League of Legends European Championship (LEC) cayeron en el segundo caso. Sin embargo, con el paso del tiempo el alemán demostró a base de éxitos y fracasos -donde siempre prevalecía el trabajo combinado con el talento- que las etiquetas pueden dejarse atrás.
La empatía al ver a Upset quedarse sin Worlds o estar a las puertas empezó a aparecer en 2018. Demasiado cruel que un jugador alemán, que encajaba perfectamente en la apuesta del Schalke 04 por los deportes electrónicos, se quedara a dos series al mejor de cinco de la clasificación. Primero en la final de la LEC contra el Fnatic que posteriormente sería finalista del Mundial, después en el Torneo Regional contra G2 Esports, que llegaría a las semifinales siendo la sorpresa. Un año después, el mismo equipo y una posición menos: tercero en el Summer Split y en el Torneo Regional con un duro 3-0 ante Splyce.
Todo el desprecio que se le asociaba -siempre desde el desconocimiento- como si fuera Floyd Mayweather Jr. pasó a ser un aprecio generalizado como el de Manny Pacquiao. 2020, la primera temporada con Origen no va del todo mal: cuarta posición en el Spring Split tras caer contra G2 Esports, que se proclamaría el campeón. Con una pandemia por el medio que afectó todo tal y como lo conocíamos, lo peor deportivamente llegaría en verano con una décima posición. Como Barney Morris «Alphari«, Upset era uno de los espejos rotos de ese equipo. Ver «decepcionar» al tirador por no poder sacar partidas adelante era doloroso, una injusticia en relación a su talento.
En los deportes electrónicos poca gente ha recibido tanto daño por anteponer lo que al final importa de verdad: los seres queridos.
Sin embargo, no cabe duda que lo peor llegó el año pasado con Fnatic. Upset dejó de lado su sueño por un problema familiar grave. Fue el centro de críticas tanto en redes sociales como dentro de su propio equipo. Todo acompañado de bromas y un acoso que obligaron a Paula Aracena, la víctima, revelar que abusaron de ella. El mal resultado del conjunto naranja en el pasado Mundial no se entiende sin la ausencia del tirador, especialmente tras la remontada del Summer Split. Sin embargo, en los deportes electrónicos poca gente ha recibido tanto daño por anteponer lo que al final importa de verdad: los seres queridos. Todo esto sin ni siquiera tener en cuenta que, incluso un año y medio después, todavía existen comentarios sobre esta indeseable situación.
El desarrollo de los acontecimientos ha dado a Upset todos los elementos necesarios para firmar su redención a través de una aparición mundialista. Todos los años en los que el tirador se ha quedado a las puertas representan los inviernos en los que nadie baja a ver el mar. Nadie quiere mirar sin buen tiempo, ni siquiera las gaviotas te permiten acercarte. Todo lo sucedido en 2021 supuso un ataque injusto al boxeador: en lugar de hacerle frente cara a cara en un ring, en igualdad de condiciones, se jugó sucio para hundirle. El peor trato llegó en el momento más injusto.
Ahora, ya en Worlds, el tirador ha corroborado aquello que Enrique Bunbury canta en El Boxeador: que golpea mejor quien golpea primero. Con la ayuda de Rubén Barbosa «Rhuckz» giró el enfrentamiento desfavorable que supone ser Miss Fortune contra Caitlyn ante Evil Geniuses para firmar un recital. Posteriormente, ya con Kalista, demostró que un boxeador debe ser un buen bailarín. Quizás fue cruel que le tocara a Chiefs Esports Club ser la víctima, pero su Kalista bailó. Bailó hasta conseguir la primera pentakill del Mundial y la segunda de su carrera. Hasta ahora no había tenido la oportunidad de golpear primero en ese escenario y ha conseguido aprovecharla. No sin un susto previo en forma de positivo en COVID-19, claro.
«Cánsate o muévete. No te pares ahora, no pensarás que todo fue una broma» define la situación de Upset en el Play-In. El inicio del tirador ha estado acorde con su nivel, pero Fnatic aspira como club a más que una fase clasificatoria. En el caso de recibir un golpe, el alemán deberá levantarse antes de contar hasta diez. Evitar el KO para reivindicar su figura. Demostrar que el cambio de sensaciones de Mayweather Jr. a Pacquiao no es fruto de la casualidad, más bien una consecuencia del trabajo hecho. De momento la virgen de Guadalupe le ha protegido en el primer día, a falta de ver si continuará haciéndolo el resto del torneo.