¿Por qué está la LCS tan mal respecto al resto de regiones grandes?
La LCS norteamericana no está viviendo el mejor de sus momentos. Ningún equipo de NA ha conseguido pasar de la fase de grupos en este Mundial 2020, ni tampoco lo hizo en 2019. Si es cierto que en el MSI de 2019 consiguieron llegar a la final, aunque Team Liquid acabaría cayendo por un contundente 3-0 ante G2.
Entonces, ¿cuáles son las causas por las que Norteamérica se ha quedado tan atrás?
Mucho talento en Academias, mucho «dinosaurio» inamovible
Hace una semana, publicábamos unas declaraciones de LS que hicieron saltar todas las alarmas. Al parecer, existen jugadores que se niegan a jugar contra Academias para no quedar en ridículo.
Esto nos lleva a uno de los problemas más acusados de la región: la falta de talento regional. Jugadores como Spica o Tactical son dos ejemplos claros de que hay muchísimo talento sumergido en la liga de Academias. Sin embargo, mientras poco a poco estos jóvenes talentos «envejecen», veteranos que ya no están al nivel siguen cobrando sueldo de estrellas.
En cada Mundial se ha visto a un jugador joven despuntar (el propio Tactical, Zeyzal en 2018…), y aunque sí que se están dando pasos correctos a la hora de fichar en otras regiones más pequeñas (como Turquía u Oceanía) todavía queda mucho por andar.
Otra de las tareas pendientes de NA como región es su estancamiento a nivel jugable, con apartados como la gestión de oleadas en las que los jugadores más veteranos no han sabido/querido adapatarse. El último punto a destacar sería el formato de sus últimos playoffs, pues 8 equipos para el formato del loser bracket acabó siendo demasiado.
De momento, el punto más importante sería la llegada de sangre nueva a la liga de Norteamérica. La llegada de estos nuevos talentos podría acabar «actualizando» el nivel jugable de la región, adaptándose al LoL moderno y permitiendo a las organizaciones volver a soñar con pasar de Fase de Grupos en Worlds.