Los campeones son una parte fundamental de League of Legends.
En los últimos meses Riot Games ha lanzado varios reworks trayendo conceptos prácticamente nuevos al juego. En el caso de Akali hablamos de esa niebla que la hace completamente invisible.
Nunu es el último rework de un campeón. Tanto, que ha pasado a llamarse Nunu & Willump, haciendo referencia al Yeti. Su bola de nieve es interesante, pero todavía se discute su viabilidad.
La hoja de ruta de los campeones que están por venir
En el «Hablemos de jugabilidad» de esta semana, un post donde los desarrolladores explican cada siete días en qué están hablando, nos han traído una actualización de lo que nos espera en cuanto a campeones en lo que queda de año.
- En el parche 8.19, el de Worlds, no debemos esperar ni campeón ni actualización.
- Poco después tendremos la actualización de Ezreal, cambios en la W y en el aspecto.
- Tras Ezreal, tendremos el campeón, que se dice que es un «mago multicolor».
El año 2017 cerró con uno de los campeones más polémicos que recuerdan en la historia de League of Legends: Zoe. La capacidad de acabar con la vida de sus enemigo prácticamente sin problemas y el «sueño» la han convertido en muy seleccionada.
Luego tuvimos a Kai’Sa, una nueva tiradora con elementos de AP y AD que tras varios buffs subió en los tiers. A fecha de hoy es un campeón que Riot está pensando en nerfear de cara al parche del mundial.
Tras el tirador nos trajeron al apoyo Pyke, un support asesino. Divertido de ver, difícil de manejar, y único en su especie. Podemos ver a jugadores de la LCS como Hylissang haciendo buen uso de él.
Aatrox, sin embargo, recibirá fuerza en la próxima actualización después de dejarlo en el olvido. Este rework completo no comparte ni filosofía del campeón, aunque no se sabe muy bien cuál era exactamente. Tras él tuvimos a Akali y Nunu & Willump.