La final de la Superliga tuvo lugar ayer para coronar a UCAM Esports Club como su nuevo campeón. Había mucho incertidumbre al principio del split por muchas cosas, gran parte ocasionadas por la marcha de varios nombres importantes, y también por la situación global.
Además, la final la disputaban dos equipos que llegaban a dicho encuentro por primera vez: UCAM y Cream Real Betis. Dos equipos que, de buenas a primeras, no son de los que más fans despiertan en nuestro territorio. Sí que es verdad que organizaciones como el Betis han pisado fuerte en redes desde su llegada hace poco menos de un año, pero la duda seguía sobrevolando el encuentro.
Pero la fanbase respondió con creces, obteniendo unos datos de audiencia muy interesantes. Ayer, la final de Superliga tuvo un pico de audiencia alrededor de los 50.000 espectadores. En comparación la final del split anterior, no se puede obviar la mejora, cuando el Movistar Riders vs G2 Arctic concentró aproximadamente a 27.000 espectadores el verano pasado.
Números en constante crecimiento
La media de espectadores también estuvo a la alza. Se alcanzaron los 31.416 espectadores de promedio, una cifra que también supera de forma olgada la de la última final: 18.226. Unos números que son un reflejo del buen split en general que ha tenido la Superliga.
Había dudas tras numerosos cambios como sponsors, naming, la llegada de un nuevo caster en remoto como Jaime Mellado… pero se han superado en todos los aspectos respecto a verano de 2020. La media en temporada regular ha subido, pasando de 14.771 espectadores a 21.414 este split de primavera. También han aumentado las horas de visualización: 1.7 millones durante 118 horas de emisión, por las 2.5 millones durante 121 horas.
De esta manera, podemos augurar un muy buen futuro próximo tras la final de Superliga, que ya ha anunciado que arrancará su split de verano el 31 de mayo.