Yuumi es uno de los campeones más controvertidos de League of Legends. Tiene una capacidad especial, dar mucho arriesgándose muy poco. Su filosofía de diseño es diferente a la de los demás: No debes elegir flash ni comprar botas. Pero lo más «grave» es que rompe la vulnerabilidad típica de un curandero.
Con todos estos elementos, Yuumi es un campeón muy diferente. Tanto que es el foco principal de muchas quejas de los profesionales que hablan de la campeona como un ente que no debería existir. Pero creo que este es un ejemplo de por qué no escuchar a los profesionales siempre.
El competitivo y el juego
League of Legends es un juego que tiene dos escenas, la casual y la profesional. Y muchas veces no se entienden.
Pensemos en Ryze, un campeón que históricamente tiene un porcentaje de victoria bajísimo. Otro ejemplo es Zoe. Sin embargo, luego en competitivo los vemos por todas partes. ¿Por qué? Porque no tiene nada que ver una cosa con otra.
El LoL que se juega en SoloQ en elos bajos no tiene nada que ver con el competitivo. Es como si tuviera otras reglas, pero en realidad no las tiene, por lo que alguien que sabe de verdad cómo funciona le va a sacar provecho a algo que un casual nunca hará.
Pero Yuumi es un caso más preocupante. En teoría, todos los campeones deben tender al 50% de win ratio. Cuanto más cerca, mejor. No depende de las manos -que sí-, depende muchísimo más de tus compañeros que otros campeones de la misma índole.
Para que dependa menos de los demás, ¿qué se debe hacer? Inflar los números. Así quizás tu compañero se va a suicidar, pero tú has sido capaz de tirar una cura potente.
Una prueba de lo que digo es que Yuumi es un campeón que, cuanto más baja es la división, menos win ratio tiene. Y se pickea en más de un 7% de las partidas, lo cuál es una barbaridad. Si os preguntáis por qué Riot hace un campeón tan diferente y excepcional, la respuesta es sencilla.
Es un videojuego.
League of Legends es un videojuego
Es un producto comercial con más de diez años de vida. Es único, en el sentido de que salvo DOTA 2 no hay muchos más MOBAS que funcionen en el mercado. Por lo tanto, necesitas algo refrescante, diferente y arriesgado para seguir atrayendo la atención del público.
Pero el problema no es Yuumi, el problema son los demás.
El balance: Todo hacia abajo
Riot Games ha sido conservadora durante años. Su filosofía de equilibrio es que nadie destaque, tirar hacia abajo. Y eso, al final causa que un elemento disruptivo genere problema a la larga. Un ejemplo es Tahm Kench y el devorar. Sólo por esta habilidad, será muy importante en según qué metas. Lee Sin es un campeón que por diseño o tiene números horribles y es injugable o estará de los mejores. Lo mismo con Thresh, un campeón capaz de salvar a alguien con una linterna, pero a la vez provocar una situación de poder, pero a la voz puede quitar vida poco a poco al rival.
Luego tenemos otro incoveniente: las curaciones son un problema para un juego con la filosofía de diseño de League of Legends. Los campeones, para ser gratificantes, deben darte algo llamado «sensación de poder» del juego. Esto es, que el daño en el juego suele ser bajo y más difícil de hacer que una cura.
Imagina que para quitar 300 de daño a un rival tienes que acertar dos habilidades y un autoataque. Sin embargo, para curar 150 te basta con pulsar la W sobre un aliado y ya estaría. Te has sentido poderoso ejecutando tu combo para quitar 300, pero luego hay un señor delante que le ha dado a un botón. Porque, ¿cómo le das sensación de poder a un curandero en un juego si no es curando mucho? ¿Alguien tiene en cuenta la cura de Kayle? ¿Recordáis anteriormente la cura de Nidalee?
Entonces tenemos a Yuumi, una criatura cuyas capacidades son las justas, con una curación poderosa de no mucho enfriamiento. ¿Cómo hacemos que se sienta poderoso? Pues así. Con una cantidad que se vea. El problema es que mientras que ella hace mucho con muy poco, los demás hacen poco con mucho.
Imaginad un MMO en donde un curandero debe soltar sus habilidades rápidamente y bien elegidas. Suele curar grandes cantidades, pero porque los rivales de uno o dos golpes dejan al rival al borde de la muerte. ¿Cuál es el counter de esta figura? Ir a por ella, porque un buen curandero puede mitigar todo el daño. Por lo tanto, suelen ser débiles y vulnerables. ¿Cuál es el problema de Yuumi? Que su mecánica especial es que no la puedes alcanzar.
Al igual que Lee Sin, o dejas sus números en la basura y totalmente olvidable, o lo vas a tener ahí. A menos que decidas bufar el daño de los demás campeones. Pero si haces eso, es posible que tengas otro problema, y es que un curandero no puede hacer nada…
¿Potenciamos los cortacuraciones? Y corremos el riesgo de contrarrestar a todos estos campeones por muy bien que jueguen por el mero hecho de comprar un objeto, lo cuál no requiere ningún tipo de habilidad.
Complicado, ¿verdad? Mi conclusión es que esto no es un problema de Yuumi, es un problema de League of Legends como un juego, y que muchas cosas tienen que cambiar antes que ese campeón que vemos ahí. Por mí, que todos estén rotos. Pero ya sabéis que esa no es una opinión muy popular…