League of Legends es un juego que, a lo largo de 10 años, está lleno de pequeñas historias curiosas. Algunas tan bonitas y satisfactorias como este caso que os traemos hoy: una madre que decidió aprender del juego para pasar más tiempo junto a su hijo.
El principio quizás nos suene familiar, pues seguro que a más de uno nos haya pasado algo similar: «Me sentía desconectada de los gustos de mi hijo. Él sólo hablaba del juego, y yo nunca había jugado a juegos de ordenador. No entendía por qué no era capaz de pausar una partida cuando le llamaba, ni su pasión por los esports. Y eso nos distanció«. ¿A alguien no le ha pasado?
Y entonces, hizo algo que seguramente ya no sea tan común, más bien lo contrario: «Así que le dije que me enseñara a jugar. Decir que fue una curva de aprendizaje difícil. Pero seguí porque quiero a mi hijo». Y claro, le tocó la experiencia ya típica que muchos conocemos: «Tras varios y desastrosos intentos en la Grieta del Invocador, donde me flamearon por no saber pingear, cambié a ARAM porque me obligué a conocerme a todos los campeones«.
Fue tal el intento de comprender más sobre las aficiones de su hijo que llegaron a ir al MSI juntos: «Pese a no jugar rankeds, me daba con poder entender partidas de la LCK, MSI y Worlds. En 2019, viajé con mi hijo a Taiwan para ver las semifinales del MSI. Es algo que nunca olvidaré.»
Lo recuerda como algo que valió totalmente la pena: «Ahora que ha crecido y se ha mudado, he dejado de jugar. Sin embargo, no me arrepiento de haber hecho el esfuerzo de aprender sobre el juego que ama. Valió totalmente la pena.»