Alguien jodidamente inteligente
La llegada a las semifinales de Cloud 9 es el culmen de un buen trabajo a lo largo de los últimos tres años
De ideólogos como Pep Guardiola, estudiosos de la táctica como Gareth Southgate a filósofos como Marcelo Bielsa. Todos los entrenadores son responsables directos del éxito o fracaso de un equipo. Muchos han conseguido a base logros impensables o títulos hacerse un hueco en la historia de sus respectivos clubes. Esto es algo aplicable a los deportes electrónicos, y Bok «Reapered» Han-gyu lo ha conseguido demostrar.
El técnico ha hecho historia al lograr que Cloud 9 sea el primer representante norteamericano en llegar a las semifinales de los Campeonatos Mundiales. El acontecimiento tiene mucho más valor si repasamos la liga regular. La organización consiguió alcanzar el segundo puesto de la competición tras varias semanas como colista. Por eso mismo, el coreano puede decir orgulloso: «soy jodidamente inteligente«.
Aunque 2018 haya sido el punto más alto de la entidad a nivel internacional, no hay que olvidar que estos resultados han sido una consecuencia del trabajo hecho en los últimos tres mundiales. Con una personalidad carismática similar a la de Jürgen Klopp, igual que en el caso del responsable del Liverpool FC, el descaro del exjugador de SK Telecom T1 no puede tapar su mayor cualidad: es un virtuoso del estudio del juego y de sus jugadores.
Cloud 9 ha sido un equipo que siempre ha tenido leyendas a nivel regional. Marcado por la voz de Hai «Hai» Du Lam, el conjunto ilusionaba mucho a sus fans en la tercera y cuarta temporada. No obstante, el quinteto más longevo de la historia de League of Legends tuvo su fin en la temporada de primavera de 2015. La escuadra incorporó a un ya liberado Nicolaj «Jensen» Jensen, pero la irregularidad fue una consecuencia de la ausencia del medio estadounidense. Fue el técnico el que puso la solución con su incorporación a mediados de 2016.
Con Jung «Impact» Eon-yeong en la calle superior, Andy «Smoothie» Ta con la titularidad asegurada y William «Meteos» Hartman de vuelta en la jungla, Reapered reconstruyó la voz de un equipo que dependía del considerado mejor shotcaller de Norteamérica. Después del altibajo de la temporada de primavera, Cloud 9 fue el único conjunto capaz de plantar cara a un Team SoloMid que parecía invencible. Más tarde en los Campeonatos Mundiales la entidad de Jack Etienne fue capaz de superar la fase de grupos como segundo clasificado en un cuadro difícil ante SK Telecom T1, Flash Wolves e I May.
Aquí fue donde los primeros efectos del exentrenador de EDward Gaming empezaron ser vistos. El coreano consiguió devolver al anterior jugador de SK Telecom T1 su mejor estado de forma. Bajo el grito de top die, el apoyo fue capaz de complementar sus ideas en la Grieta del Invocador junto a la experiencia de Meteos. Aquí es donde la segunda gran cualidad del técnico apareció: la formación de jugadores. Al más puro estilo Marcelo Bielsa, ofensivo y atrevido, Reapered es un perfeccionador de talentos.
“Un buen entrenador debe acercar al jugador a su máximo potencial, o descubrirlo. Esa es su principal función y la que debe ocuparlo todos los días en su trabajo.” — Marcelo Bielsa
Cloud 9 empezó la séptima temporada con una parte de los deberes ya hechos. Smoothie ya era una voz firme en la escuadra y el resto de miembros se habían acoplado perfectamente a sus indicaciones en partida. Sin embargo, la faceta de formador del que era jugador de Jin Air Greenwings tuvo que volver a aparecer en un caso mucho más ambicioso: Juan «Contractz» Arturo García. Reapered moldeó a la perfección un jungla agresivo que dominó la Challenger Series norteamericana como quiso. Repitió la hazaña que hizo con el apoyo y fue capaz de combinar sus mecánicas junto a una buena toma de decisiones en early game.
Gracias a ello, el conjunto pudo crear un estilo propio en su región basado en la proactividad del dúo medio-jungla. Contractz se alzaba como el mejor jungla de la región, mientras que Jensen era el único jugador capaz de hacer temblar al idolatrado Søren «Bjergsen» Bjerg. Aunque la organización fuera de menos a más en la liga regular a lo largo del año, Cloud 9 creó una marca propia en sus partidos. Y una vez más, la escuadra evolucionó de forma favorable en el máximo torneo internacional.
El equipo era un caos innovador en los mundiales disputados en China. En un metajuego donde el Incensario Ardiente y el escalado de los tiradores era esencial, fueron las selecciones inteligentes que Reapered aconsejaba las que guiaron a la entidad mucho más lejos de lo que habrían llegado a imaginar. En un grupo explosivo con AHQ e-Sports Club, EDward Gaming y SK Telecom T1 de nuevo, la organización volvió a superar una fase de grupos competitiva.
No obstante, la dificultad aumentaba en los cuartos de final. Cloud 9 debía enfrentarse a un poderoso Team WE con Jin «Mystic» Seong-jun desatado. Fue aquí cuando los picks distintivos entraron en acción. El Singed de Impact fue una auténtica pesadilla para los chinos, que hasta que no lo bloquearon vieron imposible alzarse con la victoria. Otros campeones como Aurelion Sol o Trundle vieron la luz, aunque el objetivo principal -que era ganar- no se consiguió, los norteamericanos bajo el liderazgo del técnico sorprendieron al mundo entero.
Tras un buen final de año, el técnico tuvo que volver a reconstruir el quinteto inicial. Impact y Contractz abandonaron la organización y se necesitaban caras nuevas con el mismo nivel. Fue aquí Reapered puso la mano en el fuego y no dudó en arriesgar con Eric «Licorice» Ritchie y Dennis “Svenskeren” Johnsen. Mientras el top era otra mina de habilidad individual, el coreano tenía que reconvertir al martirizado jungla procedente de Team SoloMid. «Le enseñaré a jugar de manera inteligente» declaraba antes de empezar la temporada. Y vaya si lo hizo.
Licorice estaba a la altura del talento, mientras que Svenskeren parecía mucho más cómodo en la Grieta del Invocador. Sin embargo,pero Cloud 9 recibió un duro varapalo en playoffs. No obstante, para el técnico fue un ejercicio de autocrítica importante para el futuro. Esa capacidad reflexiva, fue la que llevó a Reapered otra cara de todo entrenador de cara a la temporada de verano: la de educador.
«Me dí cuenta de que fallábamos muchas nociones básicas en los últimos momentos del Spring Split» – Reapered
Con la misma firmeza que caracteriza sus declaraciones, fue capaz de mandar al equipo de academias a tres pesos pesados del conjunto: Zachary «Sneaky» Scuderi, Smoothie y Jensen. La falta de un clima competitivo motivó al entrenador a dar una oportunidad a Greyson «Goldenglue» Gilmer, Yuri «Keith» Jew y Tristan «Zeyzal» Stidam. La faceta de formador volvió a salir, pero sin un rendimiento inmediato como en ocasiones anteriores.
Poco a poco, este toque de atención a los titulares habituales sirvió para volver a trabajar al nivel y actitud que se les exigía. Las semanas pasaban y el último puesto pesaba, pero a base de pruebas y un poco de osadía Reapered consiguió dar con la tecla: aún era necesario más aire fresco procedente de la liga de academias. Un desconocido y jovencísimo Robert «Blaber» Huang apareció en la LCS y dio a Cloud 9 aquello que necesitaba para volver a brillar.
El estudio de las nociones básicas en las que fallaba su conjunto permitió al técnico ofrecer una imagen mucho más renovada. Sí, era defendible que Blaber individualmente era peor que muchos jugadores de la liga, pero con Jensen mucho más enfocado a corregir sus errores el rookie pudo desenvolverse con soltura dentro del mapa. Sin perder la esencia de un dúo medio-jungla fuerte, Cloud 9 se renovó.
Con una calle inferior autosuficiente, la función del jungla era acomodar lo máximo posible a Licorice para poder explotar su faceta de carry. Por el otro lado, cuando la presencia del novato junto al medio danés no funcionaba, la entidad tenía un as bajo la manga llamado Swole Bros. Con Goldenglue y Svenskeren en la grieta, el equipo jugaba mucho más alrededor de las invasiones del danés que no a través de la calle superior.
En los últimos Campeonatos Mundiales, junto a la comprensión del metajuego y las selecciones marca Reapered, Cloud 9 hizo la historia que ya todos conocemos: llegar a las semifinales de la máxima competición internacional. Incluso con dificultades añadidas como la regla solo permite seleccionar un suplente, el entrenador mostró la capacidad de adaptación necesaria para prosperar en el torneo.
Por toda su influencia a lo largo de su trayectoria, Reapered merece ser recordado. El técnico es capaz de traspasar rasgos característicos de los deportes tradicionales a los electrónicos. Desde la capacidad formar como si se tratara de un maestro al más puro estilo Bielsa, hasta el más meticuloso estudio de la táctica como Klopp. Si hay algo que tanto el argentino, el alemán y el coreano tienen en común, es que su discreto paso como jugadores no ha impedido que sus mentes brillen en los banquillos.
Sin embargo, sigue siendo inevitable que la primera imagen asociada a organización norteamericana sea la de Sneaky. Pero cuando se trata de estar en la Grieta del Invocador lejos de los focos, no es ni el Cloud 9 del tirador o de Jensen. Es el Cloud 9 de Reapered, capaz de hacer evolucionar a novatos y de dar una segunda juventud a aquellos considerados por el público acabados. Después de todo, todo se reduce a «utilizar el cerebro«.
Foto de cabecera propiedad de Riot Games