Si Bardo es la punta de lanza de los apoyos es por el papel de protagonista que adquiere cada vez en la Grieta del Invocador. Sus habilidades -especialmente la definitiva- le convierten en un personaje decisivo, tanto por el lado positivo como el negativo. Aunque a priori no parece un personaje difícil, es mucho más complejo de lo que parece. Gracias a LoL Analyst os traemos la guía que os ayudará a manejar mejor el Guardián Errante.
Unas Cadenas Cósmicas eternas
La principal herramienta con la que Bardo puede cazar a sus enemigos de forma desprevenida antes del nivel seis es su Q, Cadenas Cósmicas. La habilidad aturde si conectamos las cadenas con dos objetivos: dos campeones, un campeón y un súbdito o un muro, etc. Más allá de tener esta noción básica, es muy importante saber que su rango es mucho más largo que el de un ataque básico. Por lo tanto, una buena forma de iniciar sobre los enemigos es priorizando la Q por encima del autoataque, el siempre hará daño.
No obstante, para ser mucho más imprevisibles, conocer el rango no es suficiente. Podemos acertar unas Cadenas Cósmicas mucho más imparables si utilizamos nuestro destello después. Para eso hace falta colocar el cursor en el lugar en el que queremos lanzar la habilidad antes de utilizar el Hechizo de Invocador. Con ello ganaremos una velocidad que no dará prácticamente a nuestros rivales el tiempo de reacción necesario para evitar el daño y el aturdimiento.
El portal de Bardo
Otra de las habilidades que hace tan único a Bardo es su Periplo Mágico (E), es decir, su portal. Para poder explotar la gran herramienta de movilidad hace falta explorar los lugares de la Grieta del Invocador en los que su alcance sea el más largo posible. También es importante conocer que para poder utilizarlo no es necesario estar cerca de un muro ya que el apoyo puede colocarlos desde la lejanía.
El Periplo Mágico permite tanto facilitar ganks como huir de ellos. Sin embargo, nuestro viaje por el portal puede ser interrumpido por las cadenas de control de los enemigos. Dos ejemplos podrían ser el Agarre Misil (Q) de Blitzcrank o la Sentencia de Muerte (Q) de Thresh. Por eso siempre es importante asegurar que el rival ha utilizado todas sus habilidades que aturden antes de despegar con el Periplo.
Un Destino Maleable
El Destino Maleable (R) de Bardo es una de las habilidades más icónicas de League of Legends. Gracias a su definitiva el Guardián Errante consigue ser uno de los campeones más determinantes del MOBA de Riot Games. Esto provoca que su energía espiritual deba ser utilizada con sabiduría.
En términos ofensivos, el Destino Maleable es una muy buena herramienta de cazada. Sirve para poder atrapar a los carries enemigos o a un equipo entero que se encuentra desposicionado. Si acertamos nuestras cadenas cósmicas después de usar la definitiva, la pelea grupal acabará a nuestro favor. Otra función que tiene la R es la de aislar enemigos, podemos pasar de la inferioridad a la superioridad numérica si usamos la habilidad en unos personajes pero aplicamos todo el daño en el que está «libre».
En lo que se refiere al aspecto más defensivo, podemos utilizar la definitiva para salvar a nuestros aliados. También podemos proteger las torres del daño del Heraldo de la Grieta si utilizamos el Destino Maleable sobre ellas. Finalmente, al tratarse de una especie de Reloj de Arena Zhonya, podemos mitigar daño como el del Réquiem (R) de Karthus.
Rotaciones con sentido
La pasiva de Bardo permite al campeón ser mucho más rápido en las rotaciones si recoge los meeps. Sin embargo, es muy fácil caer en movimientos que a la larga no generan ninguna ventaja. Por ello, siempre es conveniente rotar cuando:
- Has presionado a la calle inferior rival hasta estar bajo torre
- El tirador ha vuelto a base
- Tú has vuelto a base y rotas directamente desde allí