ESL ha confirmado que la Intel Extreme Masters (IEM) Fall se jugará con la última actualización de Counter-Strike: Global Offensive (CS:GO). El último torneo de los Regional Major Rankings (RMR) se disputará con el parche de Operation Riptide, que llegó al shooter de Valve el pasado 21 de septiembre y estará hasta el próximo 20 de febrero de 2022. Los equipos deberán adaptarse a ciertos cambios que probablemente puedan definir el metajuego de CS:GO en el tramo final de año.
La importancia del parche y de la IEM Fall
Más allá de contar con modificaciones en el daño de según que armas como a Deagle o el M4A1-S, el parche de Operation Riptide se caracteriza por el gran cambio que ha hecho CS:GO con sus granadas. Después de que Valve dejara caer alguna pista en los últimos meses finalmente los jugadores del shooter podrán tirar sus granadas como si de unas armas se trataran. Además, a partir de ahora el FPS contará con un escudo antidisturbios para los jugadores del bando de los antiterroristas.
Sin embargo, estos no son los últimos cambios a los que los equipos deberán adaptarse. Valve también ha introducido modificaciones en Inferno, Ancient y Dust 2. Cabe destacar el gran cambio de este último, ya que ahora los terroristas contarán con menos visibilidad en la zona de medio que está próxima a su spawn. Por lo tanto, los jugadores no podrán cubrir tan fácilmente esa zona con el AWP, un movimiento clásico dentro de CS:GO.
La IEM Fall es un torneo importante ya que es el último de los RMR, es decir, que da puntos de cara a la clasificación al Major de Estocolmo. Movistar Riders y MAD Lions serán los representantes españoles en el campeonato. Los jinetes se enfrentarán a Heroic, Astralis, Complexity, Sinners Esports y Endpoint en el grupo B. En cambio, los leones deberán hacer frente a Team Vitality, OG, Sprout, Dignitas y ENCE.